9/12/2007

No es malo comparar: debate socialista en España sobre Israel.



Luis Solana publica Israel: aprende a explicar el mismo día en el que, con presencia del Rey, los de Pepu dieron estopa a Israel en el Campeonato Europeo de Baloncesto. La cancioncilla de los Estopa que anima a nuestra nuestra selección tiene un aire musical "serbio, gitano y klezmático" muy adecuado a la España que es.

Supongo que Luis tiene por objetivo llamarnos la atención a todos en España sobre las derivas que surgen de nuestras percepciones sobre Israel.

Así, anoto el comentario La batalla olvidada del verano y Gaza del pasado 31 de agosto sobre la liquidación de la franquicia de Al Qaeda incrustada en el campo de refugiados de Nahr el Bered por parte del Gobierno de El Líbano. En él, nuestra correligionaria, y sin embargo amiga, Fátima Aburto, portavoz del Grupo Parlamentario Socialista en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso de los Diputados, afirma ligando esa situación con la de Gaza

Es la guerra olvidada, como lo es la enorme prisión a cielo abierto de Gaza, donde 1,5 mill de personas encerradas entre fronteras terrestres de homigon y alambre de espino, por aire y por mar se consumen cada día en una desesperación que ya no interesa a nadie. A mi me parece un genocidio, un holocausto, ¿como lo llamarían ustedes? ¿Alguien sabe en que consiste la Conferencia Internacional de Bush para Noviembre?.

Servidor no tiene noticia de ningún genocidio u holocausto en el que la población sometida a tales crímenes creciera demográficamente en términos absolutos y relativos mientras tanto. El hecho es que los árabes sometidos a Hamas y a Fatah estos días en Palestina no paran de criar hijos e hijas. Ello es tan bueno como falsas las percepciones que hablan de su genocidio a cargo de Israel. En España, cuando nuestras neurosis nacionalistas de todo signo exhiben para lo suyo similares argumentos, tendríamos que ser más rigurosos al respecto.

Pero el caso es que, a la postre, Israel pesa poco en Europa y, especialmente, en España. Como lo que no son cuentas son cuentos, cabe iniciar, como sugiero, comparación de los beneficios tangibles que genera el buen trato con Israel respecto de los que generan los buenos tratos con terceros.

Al efecto, inserto tablas de tendencia en exportaciones e importaciones de Europa con Irán, incluido detalle de España. Desde luego, sospecho a su vista que la propuesta de Un gran pacto con Irán, publicada hoy por Shlomo Ben-Ami en El País, tiene base sólida en Europa.

Irán depende en un 40% de su balanza comercial de Europa. Israel, en un poco más del 35%. Aparte de cómo se configure el resto de ambas balanzas comerciales, en el análisis que sugiero debe tenerse en cuenta, tanto o más que volúmenes relativos, las calidades de lo contratado. Por ejemplo, Israel vende tecnología e Irán compra tecnología… la pregunta obvia es, en ambos casos siguiendo a Groucho Marx, para qué sirve la tecnología contratada por cada una de las partes contratantes…

Como sugiere bien Luis Solana, algo debería pesar el hecho de que Israel es “el único país democrático en un mar de dictaduras” que llamamos Oriente Medio sin preguntarnos dónde estará entonces el Oriente Próximo.

Quedo aquí de momento. Felíz Año Nuevo, israelíes, pese a la estopa administrada por los de Pepu...


9 comentarios:

Anónimo dijo...

Parece que nos leen: el Museo del Holocausto Premio Príncipe de Asturias de la Concordia.
Les tocas a los israelíes hacer algún guiño.
Luis Solana

Anónimo dijo...

No niego la componente que mencionaba Engels, y que tu pareces recordar, acerca de que la superestructura viene determinada por la economía, y tampoco rebato que, en este caso concreto, tal razonamiento exigiría algo parecido a un complot direccionado contra un país muy concreto del que, como vienes a recordar, no se importan y exportan más de 500 o 600 millones de dólares.

Si voy a recordarte que la relación de la sociedad española con Israel proviene actualmente, y casi sólo, de los medios de comunicación, que son de natural tendencioso.

Es cierto que las palabras holocausto y genocidio vienen grandes para la descripción de la situación. Tal vez sea más correcto llamarlo asedio, cerco o castigo colectivo a una población miserable. No hay más que reconocer que, cuanto más pobre sea una población, muchas veces más alto es el índice de natalidad.

También se puede decir que, a ratos, la situación puede denominarse expropiación sin pago o éxodo.

Mucha gente piensa que la actuación de Israel en sus territorios ocupados es injustificable. De tu pertenencia a la asociación ASEI entiendo que piensas que la actuación de Israel está justificada. Yo, en cambio, pienso que sólo estaría justificada la defensa que hace Israel de sus territorios ocupados en el momento que otros no lo reclamen como propio, léase palestinos (o cómo tú los has denominado árabes) y es que crear un estado judío, claramente judío, y con la intención de seguir siéndolo, aunque la demografía y el fluir natural de las cosas vaya por otro camino, ha de ser necesariamente un asunto de consecuencias tremendas para todos los habitantes de la zona.

Mi opinión: si Israel no tuviera como principio ser un estado judío, otro gallo nos cantaría.

Jorge Aspizua Turrión dijo...

Evidentemente, hay cosas con las que no puedo estar de acuerdo. La demografía como excusa... ¿dónde leí cosas cómo esas, explicaciones malthusianas para todo?

Anónimo dijo...

Disculpa que haya hecho un comentario equívoco respecto al crecimiento de la población árabe de los territorios ocupados (denominados palestinos por otros y por sí mismos). Mi único objetivo era hacer ver que el motivo por el que los árabes sometidos a Hamas y a Fatah no paran de criar hijos e hijas no tiene que ver con que vivan de maravilla en los lugares que amplios sectores de la población judía consideran propios. Y es que en la primera lectura de tu post me pareció entender eso entre líneas.

Evidentemente si no estas de acuerdo con las explicaciones malthusianas puede que coincidas conmigo de que el que crezca la población árabe de los territorios ocupados no tiene que ver con su situación política. ¿O tal vez sí?

Reconozco que me gusta leer lo que escribes, pero cómo no estoy en tus coordenadas mentales me cuesta, a veces, comprenderlo.

Anónimo dijo...

No es que las palabras genocidio y holocausto sean grandes, tomadas como calificativos a la situación de los palestinos, es que son falsas y humillantes hacia quienes han sufrido un genocidio. Son muestra del intento más que archiconocido por repetitivo ya, de minimizar no solo la Shoa, sino cualquier otro auténtico genocidio como por ejemplo el armenio de principios del XX, a manos de los turcos, o el que se está hacioendo entre los animistas del sur sudanés, por ej. Es un intento repugnante como táctica para revertir situaciones que son en esencia y en consistencia diferentes pero que en potencia da más dividendos que todos los pequeños e incluso medianos éxitos de orden militar sobre Israel. Es el vale todo con tal de hundir a Israel, sea como sea.

De este chaparrón ya hemos tenido bastantes y seguirá habiendo.

Si Israel no se hubiese estructurado como estado judío y sin el espíritu sionista, no hubiera tenido razón de ser. Con lo cual afirmaciones tan contundentes en base a un divertimento ficticio, carente de rigor no nos lleva a ninguna parte y no se que gallo nos iba a cantar... ¿El de Morón? ¿Le coq gaulois? Israel es como es y punto, o se acepta o no se acepta.

Lo de las ocupaciones. Si tenemos que aceptar que cualquier territorio ocupado debe de dejar de serlo en cuanto alguien lo reclame, apañados vamos, tendríamos que rehacer la geografía política y retrotaernos en el pasado hasta donde fuésemos capaces de llegar, mientras haya documentación histórica. ¡O sea... nada! Ya me veo que nos tenemos que ir a meternos cuatro decenas de millones de españoles a la cornisa cantábrica...

No solo la demografía es una característica de sociedades pobres, también lo es de sociedades en la que la mujer solo es un objeto reproductor.

Anónimo dijo...

Para tratar de enfocar el uso de palabras como genocidio y holocausto, quisiera creer que, el que se usen en contextos que no son tales situaciones en realidad,tiene que ver con el hecho de argumentar exagerando con el fin de evitar una situación entendida como injusta. A la manera de Bartolomé de las Casas respecto a los indios de América hay gente que exagera sus argumentaciones respecto a los árabes del Gran Israel que no son israelíes, es decir, los palestinos. No creo que sea el "vale todo con tal de hundir a Israel". Simplemente hay gente que observa situaciones que ellos consideran injustas y actúan, hablan, en consecuencia.

Estoy de acuerdo contigo, kinn, en que si Israel no hubiera estructurado su estado con espíritu sionista no hubiera tenido razón de ser. Posiblemente, a día de hoy, nos encontraríamos, no con Israel, sino con un estado llamado Palestina con un alto porcentaje de habitantes judíos. Aunque esto es hablar por hablar.

En todo caso, el que tu llamas carácter judío del estado de Israel, pienso que es el elemento chirriante.

No sería difícil pensar que si no fuera por ese espíritu es posible que el Gran Israel si existiera.

Anónimo dijo...

Efectivamente es hablar por hablar de lo que hubiera sucedido si no existiera Israel, pero podemos basarnos en la trayectoria de la población árabe durante los siglos anteriores y la realidad como ente físico (Palestina) a lo largo de la historia. Ni en el 48 ni antes existió jamás y digo jamás, un idea entre esa población de identificarse como palestinos. Siempre la zona palestina fue considerada como parte inseperable de la Gran Siria, clásica-histórica (no de lo que ahora conocemos como tal). La identificación como colectivo era -y me atrevo a decir que todavía es- con el mundo árabe del cual forma parte indivisible.

Siempre recomiendo que se vuelva a leer o se lea si no se ha hecho, a T. E. Lawrence (Los siete pilares de la sabiduría, en español) y se encontrarán claves para entender mejor la situación durante estos últimos noventa años.

Respecto a la demografía, basta echar un vistazo a cualquier lista publicada por algún organismo de la ONU y se podrán comparar: características sociales, nivel de pobreza, confesión religiosa de una o más etnias que habiten el país, tasa de natalidad, tasa de mortalidad, etc. De esta forma los palestinos quizá no sean el pueblo más aplastado como muchos lo intentan mostrar y a lo mejor (lo que ya sería un hito) hasta se descubre que gran parte de su situación es debida a su propia responsabilidad, pero siempre es más fácil echar las culpas al vecino.

Saludos

Jorge Aspizua Turrión dijo...

Nietzsche decia "al diablo, el pueblo y las estadísticas"

Yo digo lo contrario. Pueblo y estadíticas, son cosas de Dios.

Feliz Ramádan. Shana Tová

Anónimo dijo...

Las estadísticas bien interpretadas deberían ser el pan nuestro de cada día.

Estoy de acuerdo contigo, kinn, en que la población llamada palestina entra en la categoría de árabe. El que se llamen a día de hoy palestinos es simplemente un hecho al que conduce el discurrir de la historia. No sólo eso, el que a día de hoy esos habitantes, que se consideran un pueblo, deseen o vean como necesario para su futuro conformar un estado, tiene como elemento clave el que se haya creado un estado de carácter judío en un solar tan disputado.

Yo pediría a los israelíes que fueran flexibles respecto al espíritu sionista del estado de Israel. Me gusta pensar que esa cesión disolvería muchos escollos que parecen montañas cuando no lo son.

Únicamente añadir que la crítica a la actuación de los palestinos la hago cuando me escucha uno de ellos. Mi discurso en los comentarios anteriores parece desequilibrado; no lo es porque sólo he expresado una parte.