¿Triunfo de la voluntad? El GEES y los hechos, con todo respeto y simpatía

“… no sólo la intervención contó con una causa justa, sino que, a pesar de los numerosos errores cometidos en estos últimos años, hoy es más visible que nunca que la derrota no sólo no está cerca, sino que podría evitarse…. El PSOE de Zapatero está perdido para la comunidad occidental y nuestros aliados. El PP debiera comenzar a ganárselos decididamente. Es el destino de España, en tanto que nación responsable, lo que está en juego”, afirma hoy el GEES.

Extrapolo al respecto la parte final del comentario de Arkin 250 Dead: The Surge is Working publicado en The Washington Post por Arkin el pasado 16 de agosto de 2007 en su Early Warning.

"Petraeus propagandists argue that the intended audience was the Congress and warn that august body not to ignore the success of the surge and the current military effort. This is similar to my no-ransom-for-hostages policy: Ignore the day-to-day events. Nothing that happens in the country contradicts the progress that is being made.

But they go further than I would. We don't need to reward the terrorists with our attention, but we shouldn't ignore whatever the Pentagon tells us to. Its argument is that al-Qaeda is one the ropes, that it is losing ground, that military progress is being made, that the bad guys will do everything they can to embarrass Petraeus and provide ammo for those who are against the war. The pro-war crowd wants America to ignore the mass bombings and the death of civilians and focus on the great efforts of the men and women of the U.S. military. Essentially, they argue that the only evidence anyone should pay attention to is that which the Pentagon provides.

Regardless of Petraeus' progress, however, the central reality in Iraq is this: The Iraqi government is failing to serve the needs of the people or to provide security. Maybe that's beyond Petraeus's control. But real military progress won't matter very much if political progress is lagging".

En la foto, uno de los que, políticamente, está ganando la guerra, de visita oficial en Kabul, Afganistán, el pasado día 14.

Anoto la nota de prensa, editada en claro castellano por la agencia oficial iraní IRNA.

"Ahmadineyad es recibido en Kabul por Karzai

Kabul, Afganistán. IRNA. 14 de agosto de 2007

Nacional. Internacional. Política.

Hoy martes por la mañana el presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, ha aterrizado en Kabul donde ha sido recibido por su colega afgano, Hamed Karzai, en el Palacio de la Presidencia.

Tras el recibimiento oficial, ambos han iniciado una conversación a puerta cerrada, aunque está previsto que en breve comparezcan para la prensa.

La de hoy es la primera etapa de una gira que ha iniciado Ahmadineyad por Afganistán, Turkmenistán y Kirguizistán, país éste último donde además tiene previsto asistir a la cumbre de jefes de Estado de la Organización de Cooperación de Shangai, en la que Irán es miembro observador.

El mandatario está acompañado en este viaje por algunos de sus pesos pesados, como el ministro de Asuntos Exteriores, Manuchehr Mottaki, y el secretario del Consejo Superior de Seguridad Nacional, Ali Lariyani.

Ahmadineyad es el segundo presidente de la República Islámica de Irán que visita este país con el que comparte lengua y cultura".

Y enlazo con un titular de la misma procedencia de hoy:

Irán exportará anualmente 35 mil millones de metros cúbicos de gas a Europa

Cabe preguntarse qué empresas europeas gestionarán ese gas...

Un único comentario general: el acuerdo entre el PP y el PSOE sobre la estrategia nacional a seguir en todos los asuntos clave no puede basarse en la búsqueda del triunfo de la voluntad de poder de unos sobre otros. Pero no sé si soy lo suficientemente oscuro como para ser claro: el deber de respeto y de simpatía hacia los lectores del GEES y los propios así lo exige...

También lo exige la obligación de no dar bazas a los malos...

P.S. Uy, no sé cómo se me ha pasado llamar la atención sobre Para otras amenazas, otros ejércitos, artículo de Jesús Cuadrado, portavoz del PSOE en la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados, sede de representación de la soberanía nacional.