Releyendo a Ernst Nolte encuentro una diferencia sustancial entre este autor y los plumillas que polemizan a propósito de un libro de la editorial Akal sobre Educación para
Nolte intenta razonar sus intelectualmente limitadas –por tanto, inmorales- tesis, tan alejadas como las de Heidegger, digan lo que digan no pocos del resto de sus discípulos, de la más profunda ética cristiana.
Regreso a Heinrich Böll, autor que parece enterrado en
+ Al conde Schwerin von Schwanenfeld respondiendo a Freisler "pensé en el sinnúmero de asesinatos", (pg. 93);
+ A los Von Hammerstein, padre e hija. ¿Quién iba a imaginar que la hija del general jefe del Reichwehr se casó en 1934 con un judío, en medio de toda aquella locura asesina que ya se desataba?.
Leo, al cabo, la enésima reelaboración del viejo y manido artículo de Juan Goytisolo contra Israel y los EE.UU. hoy en El País: Gaza, abandonada.
Lo encuentro muy afín, en paralelos más allá de la literatura, con las tesis de Nolte. Y a ambos, creo, los leen con fruición, no sólo los chavistas, sino sus socios, los guardianes de la revolución de Ahmadineyad.
Mi comentario, quizá, está demasiado influido por la visión de las fotos tomadas por el soldado alemán Johannes Hahle en octubre de 1941 en los caminos que llevaban de Kiev a Babi Yar... una acción que el mentado Nolte seguro que incluye en las preventivas contra partisanos. No es poco avance que, tras algunos tonteos, las derechas españolistas no hayan adoptado como guía a Nolte -al menos, no completamente- y se hayan hecho neocon, siguiendo preceptos de la revista Commentary... tan judía como alemana, en tanto que idealista siempre...
Temo, y concreto, que Goytisolo -librando su propia y barcelonesa guerra civil- termine dando la razón a Nolte, y no a Böll… ya veremos qué hará Arzalluz, otro discípulo -me temo- de Heidegger, si llega la hora en Irán, en Venezuela o...
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