El mejor militar español del que tengo noticia -me juego en ello la cabeza y los cojones- tuvo el valor ayer de calificarme de "intelectual", al requerir mi asistencia en un acto que, en principio, no contempla tratar los asuntos que se siguen en este minarete personal. Según como vea el transcurso de dicho acto, daré cuenta de lo que allí se trate.
Otrosí, desde las harkas virtuales, se me comenta que se va a activar bajo mando español un Batallón de Reacción Rápida RC-W en Afganistán - S.P.Q.R., italiano y español- hecho me parece un reto difícil pero fundamental. Su jefe tendrá una enorme responsabilidad y necesitará todos los apoyos... regulares e irregulares. Me fío de él porque hay gente decente que así lo hace; por ello, hay que permanecer en su apoyo atentos en todos los escalones, civiles y militares. De momento, en la foto, el mejor puesto de observación del que hay noticia.
Anotar tales noticias me obliga a elevar el alza y comentar que:
1. El paradigma político de las misiones de las Fuerzas Armadas españolas está vigente en el conjunto de preceptos de Estado propios de la nación, fijados flexiblemente en la Constitución Española de 1978, desde su Preámbulo hasta su Disposición final.
2. Los Estados, tanto más los democráticos, siguen siendo los principales instrumentos para organizar las vidas de las gentes proporcionando garantías positivas de seguridad. Tal se anota tanto en los discursos sobre la Alianza de Civilizaciones -hoy mismo- como en la práctica de organizaciones como la ONU, la OTAN o la propia Unión Europea.
3. Pero como la vida sigue, las Fuerzas Armadas españolas han visto profundamente alterados los paradigmas estratégicos, operacionales e, incluso, tácticos, que definían su modelo de actuación como corporación desde 1978 hasta hoy. Conviene, a efectos didácticos, anotar algunas consideraciones:
+ Las Fuerzas Armadas eran y son instrumento de acción del Estado. Habiendo logrado todos eliminar en los años 80 todo rastro de "ley de jurisdicciones" -que convertía, a la prusiana, ese instrumento en cosa aparte del Estado desde 1906- las misiones concretas de las mismas abarcan todo tipo de supuestos en los ámbitos interior y exterior de la acción del Estado. Lo que define la legitimidad de esas misiones no es el quién las ejecuta, sino quién las dirige bajo control democrático efectivo y tutela judicial sometida asimismo a dicho control. El control de inmigraciones y tráficos ilegales, la neutralización -mejor mediante captura- de criminales y la protección de infraestructuras y líneas de comunicación son cometidos que la Revisión Estratégica de la Defensa de 2003 -pactada entre PP y PSOE con mucho coste personal para algunos de sus actores- tenían ya previstos. Urge su actualización enfocada e implicados los Ministerios correspondientes de forma integral, bajo la dirección de la Presidencia del Gobierno.
+ Las Fuerzas Armadas pasaron, entre los años 80 a 90, de ser "fuerzas de guarnición" -con el riesgo de tener mentalidad "estabulada", a veces notoria en el ámbito de la fuerza terrestre- a ser "fuerzas de proyección", en frentes discontínuos de seguridad y defensa avanzadas asumiendo las servidumbres de "trashumancia" en un mundo completamente interrelacionado en el que cada acción tiene efectos contrastables en cada ámbito.
+ Nutrir, sostener y apoyar toda acción de las Fuerzas Armadas son cometidos que no pueden estar sujetos a programación enfocada primordialmente sobre intereses industriales, tanto más si estos son locales. Hay que ir más allá de la previsión de capacidades de las propias Fuerzas Armadas: el enfoque debe ser integral, orientado a cumplir cada misión en el amplio espectro de las previsibles en todo tipo de conflictos y emergencias. Adecuadamente discernidos los conceptos, el conocimiento, los sistemas y los procedimientos establecidos podrán ser aplicados en el conjunto de la acción del Estado... y de la deseable iniciativa privada.
Para ilustrar estos tres puntos señalaré dos ejemplos:
1. En Zaragoza, espero, la Exposición Internacional anunciada tratará sobre el agua. En la gestión del agua, España se juega su futuro. En la gestión del agua, las Fuerzas Armadas españolas han generado conocimientos prácticos que, pueblo a pueblo, calle a calle, pueden ser aplicados. Otro tanto ocurre con la energía, tan directamente vinculada al líquido elemento.
2. En todas las Fuerzas Armadas de países avanzados se ha pasado de primar la "masa de fuego" a la "precisión del fuego". La obtención y el empleo de municiones de alta precisión implica el desarrollo de tal cúmulo de algoritmos que su suma y distribución en otros sectores de la actividad humana genera enormes economías. Para ejemplo muy simple, los Raven (Cuervos), sistemas que en España se podrían haber ido desarrollando eficientemente, por lo menos, desde 1982, tal y como servidor podría dar razón, nombres, apellidos...
Cuando con razón -y quizá algún exceso de optimismo- se anuncia que España puede convertirse de pleno en la octava potencia mundial en términos políticos, económicos y sociales, la atención y el cuidado de sus Fuerzas Armadas es clave. No descuidemos esa tarea, ni en 2008, ni en 2012.
P.S. Me felicito de que Rajoy, «orgulloso» de que Pizarro vaya por Madrid porque tiene «voluntad reformista» y «más ganas» que Solbes ; detrás del mentado, Tertulia económica con Alberto Recarte y Carmen Tomás; me pregunto en quién se piensa para el Ministerio de Cultura...
1 comentario:
Yo diría que esta entrada es un scoop.
Buen disparo.
Saludos.
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