Primero, el pasado

España es una nación de interesados desmemoriados, dicho sea con reparto a derecha y a izquierda. A veces, sólo a veces, envidio a Francia; por ejemplo, cuando anoto cómo De Gaulle en 1944, en plena Liberación, al recibir a Malraux por primera vez, le espetó: "Primero, el pasado...".

Los consensos básicos en materia de Asuntos Exteriores, Seguridad y Defensa cerrados entre González y Fraga, con anuencia imprescindible de Pujol, tras el referéndum sobre la permanencia en la OTAN de 1986, fueron minados más o menos a partir de 1992, año luminoso de las Olimpiadas de Barcelona y de la Expo AVE de Sevilla. Seguidamente, anoto el decálogo -incompleto y sin apenas los enlaces que conservo- de mi personal memoria al respecto.

1. Para 1993, con toda claridad, la estrategia interior y exterior contra ETA fue dinamitada concurriendo la aparición en los periódicos de los cadáveres, que se identificarían como los de Lasa y Zabala, tras largos años en los que policías y jueces no supieron investigar de oficio sobre los restos conservados en cementerio público valenciano.

2- Para esas fechas, aplaudida la secesión violenta de Croacia y Eslovenia respecto de Yugoslavia, se elabora por parte de las derechas españolas -españolistas o no- doctrina sobre la justa intervención humanitaria con que justificar los apoyos a similares iniciativas, unos fuera y otros dentro de la misma España. Mi amigo, el diplomático Jorge Hevia, no me negará la legitimidad de esta apreciación y las fuentes vaticanas de inspiración para tantos nacionalistas, españolistas o no.

3. Para 1996, impuesto por Pujol en los Pactos del Majestic, se liquidó políticamente el modelo mixto de Fuerzas Armadas, acelerando la instauración del modelo de Ejército de recluta de tropa y marinería bajo contrata sin tomar las debidas precauciones.

4. Entre 1994-98, auspiciado por el PNV y otros socios nacionalistas "de derechas", el PP termina por reconocer la existencia de un llamado "Movimiento de Liberación Nacional Vasco" con el que negocia a cuatro bandas.

5. Para 1999, regularizada de pleno la pertenencia de España a la OTAN -en unión de Polonia, Hungría y la República Checa- la participación española en la intervención sobre el Kosovo -a falta del empleo de fuerzas terrestres propias en la misma crisis- demuestra el límite de la capacidades operativas y políticas de nuestro sistema de Seguridad y Defensa.

6. Para 2000, impulsado por una mayoría absoluta parlamentaria para llevar a cabo la llamada "segunda transición" por hagiógrafos y escribidores, Aznar da cerrojazo político y financiero al desarrollo equilibrado del estado de las autonomías. Mayor Oreja ni con asistencia de los socialistas había logrado ganar elecciones autónomas en el País Vasco y, en Cataluña, Vidal Quadras no se configura como alternativa de gobierno o de pacto parlamentario ante los nacionalistas catalanes de todo signo. Significativamente, la junta directiva del F.C. Barcelona -muy afín al PP- se erosiona y terminará siendo desplazada por nacionalistas catalanes al final de la legislatura iniciada en 2000. En el País Vasco, se utiliza a los antiguos socios socialistas de Mayor Oreja para intentar impedir la afloración del nuevo liderazgo socialista en el conjunto de España.

7. Para ese mismo año de 2000, el círculo inmediato de Aznar encuentra en la doctrina neocon que inspira a Bush Jr. el engarce ideológico y fáctico que permite dar un giro a la estrategia antiterrorista contra ETA tras el fracaso de las negociaciones auspiciadas por el PNV en 1998. Se acelera -financiada con créditos a futuro, no computables en la contabilidad nacional de inmediato- la aplicación de programas de modernización de las Fuerzas Armadas bastante definidos para 1996 y semiparalizados por el impacto organizativo y económico de la supresión de la "mili".

8. Para el año 2001, producidos los atentados del 11-S, España se beneficia de las medidas antiterroristas aplicadas por los EE.UU. en relación con ETA y mantiene una implicación política máxima en la lucha contra Al Qaeda, explotando buenas relaciones con la Rusia del "chekista" Putin, con determinados árabes moderados -el régimen de Argelia y Arafat p.ej.- e Irán. Esta implicación no es correspondida por la militar equivalente en el exterior, que permanece en los límites establecidos para el Kosovo en 1999 ni por una sistemática acción policial y judicial en el interior contra los sospechosos de alentar las doctrinas de Bin Laden y asociadas. En el plano interior, la lucha contra ETA es prioridad operativa máxima asistida por una más decidida y coherente acción judicial y, políticamente, por el Pacto por las Libertades y contra el Terrorismo, del que Rajoy dijera en principio que era un "conejo de la chistera de Zapatero".

9. Para 2002, por impulso de facultativos civiles y militares y liderado por el entonces SEGENPOL Jiménez Ugarte, se inicia un proceso de Revisión Estratégica de la Defensa, limitado a dicho Departamento. En el Cuerpo Diplomático y en buena parte del PP, la iniciativa no tiene adecuado respaldo. La crisis de Perejil con Marruecos -negocios con Argelia y la construcción del nuevo puerto de Tánger al fondo- se soluciona por la intervención de los EE.UU. -Colin Powell- a instancias de Ana de Palacio y de Javier Solana. En el seno del PSOE, consintiendo la participación de algunos militantes la dicha Revisión Estratégica, se refuerzan los guiños "altermundistas" para refuerzo de la cohesión interna y atracción del electorado más "izquierdista". En el plano interior, Herri Batasuna, pese a su ilegalizacion, mantiene su estructura social de apoyo y el conjunto de los nacionalismos periféricos incrementan su peso electoral. La caida de CiU tras la retirada de Pujol en Cataluña tiene la misma importancia que el ascenso del BNG en Galicia, prolegómeno de la desaparición del "bastión popular" -como hoy Madrid, Valencia y Murcia- en dicho viejo Reino.

10. Para 2003, las redes de Al Qaeda y sus franquicias operan con relativa facilidad en España. La campaña para el derrocamiento de Sadam se convierte en motivo de debate interno en España. Aznar -pese a estar en las Azores con Blair y Bush, atendidos por José Manuel Barroso, hoy presidente de la Comisión Europea, todos en la "verdadera foto"- no se atreve a enviar fuerzas de combate, ni terrestres, ni navales, ni aéreas, a Irak...

El resto es hoy. A todo esto, no sé que pretende alguno que yo me sé felicitando al Rey, ayer: "Roma no paga a traidores". El mañana, ya veremos.

P.S. La televisión chavista realiza una campaña contra el Rey, con etarras, ¡ay!, navarros al fondo: "quod erat demostrandum".