10/13/2007

Mi civilización... Juliette Binoche y otras damas francesas

Juilette Binoche. Es más o menos de mi quinta, Tirador,... a ella creo que le cantaría Hurt, amigos Lobo y Alijar.

Anduvo en los entornos de la virgen de Yo te saludo, María, del inquietante Godard, y, también, fue la enfermera canadiense de El paciente inglés.

Sobre todo, es la mujer presente en Azul, Blanco y Rojo, del irrepetible Krzysztof Kieślowski, el autor de la mejor reflexión cinematográfica sobre los mandamientos de la Ley: El Decálogo.

También Binoche es la madre de Chocolate.

Binoche es la elegancia de la vida normal. Como se comprueba seguidamente, qué despertar.


Su antecesora, aunque sea anglo-franco-escocesa, Jacqueline Bisset: cómo sabe envejecer esta dama, más allá de La noche americana, del persistente Truffaut con la aquí ya mentada Valentina Cortese. Abajo, Jacqueline Bisset interpretando a Sara, esposa de Abraham.


Junto a Candice Bergen -viuda desde 1995 del imprescindible Louis Malle- intepretó en 1981, bajo las órdenes del genial pero irremediable bujarrón George Cukor, la tragicomedia Ricas y Famosas, ocasión para incluir la escena de la bronca con doblaje en castellano, hermosa trampa.

Lo cierto es que la actriz de Amelie me pilla un poco viejo. Pero sigo atendo a las damas francesas aunque, nacidas en Túnez con origen italiano se llamen Claudia Cardinale.

Aristócrata siciliana en El Gatopardo -de Lampedusa/Visconti- siempre con Alain Delon -qué cabrón- o interpretando a la argelina Aicha en Mando Perdido, Los Centuriones, rodada en España, también en el viejo cuartel de Conde Duque, en Madrid: recuerden la escena final con un Alain Delon que abandona finalmente asqueado y cínico a sus camaradas.

Aquí, la Cardinale en su propio despertar.


Un día contaré la historia de la fábrica de ese cuartel, vinculada a la introducción del primer impuesto general sobre la Renta de las Personas Físicas... en 1710.

Quedaría escribir acerca de las damas del cine y de la escena francesa de anteriores tiempos. Pero hoy, que no se me olvide Carole Bouquet: para los más exquisitos, esposa -qué cabrón- del gran Depardieu.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Binoche y Bouquet, dos de las mujeres más atractivas que he visto. Introduzco una nueva variable: Sophie Marceau

Jorge Aspizua Turrión dijo...

Me pillas fuera de juego

J.