'Nacionalización' de Spanair y de resíduos nucleares: temas de Seguridad Nacional

Leemos con suma atención los contenidos del siguiente titular: Empresarios catalanes comprarán a la escandinava SAS el 80% de Spanair.

Scandinavian Air System (SAS) quería deshacerse de Spanair en las mejores condiciones posibles. Hoy se deshará de Spanair lo mejor que pueda. Me agrada que la información resalte un factor de Seguridad Nacional en la operación de la que se avisa:

"El presidente de consorcio público-privado Turisme de Barcelona, Joan Gaspart, anunció hace meses que un grupo de empresarios catalanes, apoyados por el gobierno catalán, buscaban un operador con capacidad financiera para hacerse con la aerolínea de SAS".

Joan Gaspart es "culé", catalán, español y conservador. Bien lo sabe el PP desde sus tiempos como vicepresidente del Barça de Núñez y Navarro. Es, además, un magnífico empresario bien dispuesto a apoyar las mejores causas. "Nacionalizar" Spanair en comandita con empresarios españoles como lo son los catalanes mentados es una de ellas...

El futuro de España y sus intereses necesita de la acción positiva de empresarios emprendedores y de políticos con visión clara ante ese futuro.

Sorprende por ello que GEES escriba Cumbre de Poznan. Veinte nucleares al año.

Si el Partido Popular, con mayoría absoluta a partir de 2000, hubiera roto el candado nuclear, hoy estaríamos a breve plazo para inaugurar la primera de las centrales nucleares nuevas. No sucedió así. Lo que GEES denuncia y la solución que promueve es, hoy como entonces, asunto de Seguridad Nacional.

Se decidió, entonces y ampliando la estela de lo decidido anteriormente, incrementar nuestra dependencia directa en materia de petróleo y, con mucho riesgo, de gas. Ello se puede demostrar con fechas, datos y contratos. También se puede demostrar cómo se decidió el establecimiento de subvenciones públicas -hermoso ejemplo de "liberalismo ecologista a la austríaca"- para promover proyectos privados de energía renovable desde las Administraciones Públicas, acción continuada hasta hoy.

Hoy podemos llorar todos ante la inestabilidad del mercado energético y nuestra peculiar posición en él. Lo peor será si ha de caer "alguno de los nuestros" en defensa de la calidad de vida de los españoles.

Lamento tener que recordar que los resíduos nucleares de alta y media actividad y larga vida tendrán que ser instalados en algún lugar de España, juntando los almacenados en las centrales nucleares existentes y los depositados en Francia. A finales de los años ochenta -esto también se puede demostrar- cierta autoridad autonómica dijo que en Castilla y León no se podían ubicar las facilidades precisas.

Hoy, como entonces, la alternativa más viable -dicen los expertos en la materia- está en la veguería del Delta del Ebro, españolísima ella. El depósito de dichos resíduos es muy seguro y, desde luego, reportará grandes beneficios a dicha veguería y a las comarcas colindantes de Tarragona y Castellón de la Plana, (foto inserta, cortesía de Iberimage)

Los nacionalistas de derechas en el Principado llevan muy bien la cuenta de estos y otros asuntos. Los ecologistas, tan denostados por GEES por buenas razones, también. La información más seria al respecto, por facultativa, está en el Foro Nuclear.

Al margen de todo ello, me satisface ver la cuenta de patrocinadores y donantes de la Fundación Clinton: Saudis, Blackwater among Clinton foundation donors (Associated Press). Ruego extraígan la lista completa. De otras Fundaciones estadounidenses iremos sabiendo...