4/21/2007

Algo se mueve en Sefarad

Anotemos varios hechos:

  • Desde la derecha aznarí, Rafael L. Bardají escribe en ABC el viernes 20 de abril su En Defensa de Israel.
"La bandera de la causa de Israel no puede quedar sólo en manos de quienes desde la derecha española pretenden ostentar la exclusividad en su defensa. Proclamamos que la defensa de Israel no es exclusivo deber de ningún partido u organización ideológica, sea de izquierdas o de derechas, sino deber de todos los demócratas.

Quienes conocemos bien los riesgos y amenazas que sufre Israel, tenemos clara conciencia de que estos son los mismos que pesan sobre España. Nos vemos asaltados por las acciones terroristas de quienes ejecutan sus guerras particulares contra los valores democráticos arduamente plasmados en la historia y en las normas de gestión ejecutiva, legislativa y judicial de los sistemas políticos occidentales vigentes. No podemos perder la noción de que el progreso, el bienestar y la seguridad de nuestros pueblos y sociedades abiertas dependen de la preservación y de la profundización en la aplicación cotidiana de dichos valores y normas.

Israel no sólo es odiado y atacado por ser el Estado judío. Lo es, al tiempo, por haber demostrado desde su fundación que los valores y normas democráticos son preservados y profundizados incluso bajo condiciones permanentes de guerra abierta o soterrada".
  • El jueves 26 de abril, Dalia Itzik, Presidenta del Parlamento de Israel y jefa de Estado en funciones, dará una conferencia el próximo en el Congreso de los Diputados en acto organizado por Manifiesto.
  • De todo ello, y de algo más, se habla este fin de semana en Radio Sefarad

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Varios amigos -y algún enemigo inteligente- me han preguntado por qué estoy embarcado en la promoción del dicho Manifiesto.

Aunque uno no es doctor, pese a lo que dedujeron mis interlocutores, mis tesis para hacerlo se consolidaron a propósito que cierta entrevista publicada el pasado febrero por el Project Interchange del American Jewish Committee cuyas respuestas transcribo seguidamente en castellano.

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Questions for Jorge Aspizua Turrion:


1. How would you characterize the political relationship between Spain and Israel? Could you share with us your sense of how that relationship has evolved in the past years and where you see it heading?

Creo que el carácter de las relaciones hispano-israelíes es de “fría amistad”. No estoy en condiciones de evaluar el asunto desde la perspectiva israelí. Desde mi observación de la realidad española, la frialdad existente hacia Israel, tiene profundos y complejos orígenes. De un lado, sigue pesando popularmente el tradicional antisemitismo cultural de raíz católica; de otro, hay reminiscencias antijudías en sectores, hoy minoritarios, de las derechas españolas vinculados al fascismo europeo del siglo XX. Finalmente, en la izquierda predomina –sea cual sea su propia percepción sobre la realidad de España como nación- el discurso anti-israelí elaborado en Europa desde finales de los años 60, hoy vinculado al discurso general contra los EE.UU.

Debo de señalar, que para mi sorpresa y mayor satisfacción, buena parte de las élites de poder de las derechas españolas -sean españolistas o nacionalistas catalanas o vascas- comprenden de una forma muy positiva el derecho de Israel a existir como Estado democrático occidental en Oriente Medio. Pese a las diferencias ideológicas y tácticas que sostengo con la corriente que representa el ex primer ministro Aznar, debo saludar su liderazgo en este cambio de actitud en medios políticos activos conservadores y católicos, impensable siquiera hace veinte años.

2. How would you describe common public perceptions or sentiment towards Israel? In what sectors do you find the most support-or hostility towards Israel?

Indudablemente, el discurso más hostil hacia Israel proviene de las elites intelectuales de la izquierda. Dichos grupos, que dominan amplios espectros de la comunicación de masas y de la enseñanza universitaria. Curiosamente, estos suelen coincidir abiertamente en argumentos y retóricas con otros más sutiles y ocultos: los presentes en núcleos significativos de los empleados públicos, ya se proclamen de izquierdas, de derechas, o, más comúnmente, como profesionales apolíticos al servicio del Estado y sus administraciones.

El público en general, sin embargo, pese a la enorme influencia de televisiones, radios y periódicos mantiene distancia respecto de asuntos que les resultan ajenos.

En mis relaciones cotidianas personales observo con relativa frecuencia que esa influencia, ejercida en muchos casos negativamente respecto de Israel, no limita en modo absoluto la inteligencia natural de las gentes a la hora de discernir lo que está bien de lo que está mal. Es gratificante constatar no pocas veces entre humildes e iletrados que el sentido y el sentimiento de la libertad personal y comunitaria es un poderoso antídoto frente al veneno de la manipulación.

3. How would you characterize the outcome of the Lebanon War for Israel and Hizbollah – in either military, economic, political or diplomatic terms? How was the war portrayed in the mainstream press? How did the Spanish public react to the conflict?

La guerra de los 33 días en El Líbano ha supuesto, tal vez, un punto de inflexión en el debate público y publicado sobre Israel.

Debo señalarles que los españoles hemos sido educados, primero bajo el franquismo, luego a través del lento proceso de instauración de la democracia y, finalmente, en los últimos diez años en la idea de que toda guerra es rechazable, que es preciso lograr y mantener la paz a cualquier precio, sin atender a ninguna otra consideración. Los ecos de la guerra civil española presentes en las familias a través de la memoria de los abuelos han ayudado mucho a esta percepción social generalizada.

Los discursos políticos y periodísticos se construyen atendiendo a esa visión mayoritaria por parte del público. Ni siquiera el sr. Aznar se atrevió a plantearse nunca el empleo de la construcción verbal “guerra contra la dictadura y el terrorismo” durante las campañas que eliminaron del poder, primero, a los talibanes de Afganistán y,luego, al régimen de Sadam Hussein en Iraq.

El hecho es que, por primera vez desde la guerra del Líbano en 1982, las voces y los escritos en defensa del derecho de Israel a defenderse contra la agresión han aflorado con fuerza y rigor en España.

Incluso en el partido socialista en el poder, mi partido, se ha desencadenado un movimiento que, rechazando gestos y expresiones desgraciadas durante la guerra del verano pasado en nuestras filas, ha iniciado un sostenido combate político para convencer a nuestros correligionarios y a nuestros compatriotas en general, de que la causa de Israel, hoy, es tan propia y justa para izquierda democrática como lo fue en 1948 en todo el mundo.

4. Could you summarize Spanish foreign policy priorities and goals in the Middle East? What is your view of recent attempts to resolve regional conflicts by promoting further and deeper engagement from Morocco, Saudi Arabia, Jordan or Egypt?

España, como el propio Israel, es un Estado-nación más, sometido a condicionantes diversos en los que prima la necesidad de asegurar la seguridad de las vidas de sus ciudadanos y su desarrollo en todos los aspectos. En los Estados-nación avanzados como España e Israel, estos factores son clave para el sostenimiento de los sucesivos gobiernos y, en cualquier caso la legitimidad del sistema político democrático.

Más allá de los discursos sobre Alianza de Civilizaciones, promovida por el primer ministro Zapatero, o sobre la defensa de la democracia en el mundo, promovida, a la española, por los conservadores españoles, hay hechos objetivos que fijan la agenda diplomática de España.

Por ejemplo, España es un consumidor puro y duro de energía importada. Y, al tiempo, hace ya veinte años que decidimos no construir más centrales nucleares en nuestro suelo para producir electricidad.

Nuestra dependencia en materia de gas natural –casi el 17% de nuestro consumo de energía- alcanzó en 2005 el 44,9% respecto de Argelia –Y el emirato de Qatar, desde el Golfo Pérsico, junto a la multiétnica y plurirreligiosa Nigeria, desde África, aportan respectivamente el 14,2% y el 15,2% de nuestro consumo total. Egipto y Omán, conjuntamente, nos suministran un 13,5%. No puedo dejar de señalar que el gas argelino llega a España mediante un gaseoducto que pasa por Marruecos y que será pronto complementado por otro directo entre Argelia y España a través del mar, muy similar que enlazará directamente Alemania y Rusia, y que permitirá dejar de usar el viejo gaseoducto que cruza Polonia.

En materia de petróleo, que representa el 53% del consumo español de energía, las cifras son menos contundentes en apariencia. Pero si tomamos en cuenta la estrategia general de Rusia en relación con los países árabes e Irán- que suministran a España en conjunto el 38’8% de nuestro petróleo, además del gas que he señalado- se comprenden muy bien algunas actitudes simbólicas, tan importantes en diplomacia. Así, el primer ministro Zapatero deja que le pongan una kefiya palestina en plena guerra en El Líbano.

Pero también esos datos explican, lo cual se destaca lógicamente menos en medios afines a Israel, cual es la razón última de ciertas defensas cerradas de los conservadores españoles respecto de la toma de posición de intereses rusos en materia energética y tecnológica en Europa, a través o no, de Alemania y Francia.

Israel no puede proporcionar a España, ni gas, ni petróleo ni grandes contratos de obras públicas ni gran consumo de nuestros productos de exportación. Esa es la debilidad de Israel en los fríos cálculos de los astutos políticos y empresarios españoles, a derecha y a izquierda,...

Arabia Saudita, Marruecos, Jordania o Egipto, juntos o por separado, están, en principio y sólo considerando el problema energético de España, en mucha mejor condición que Israel para obtener el mayor apoyo español, bajo cualquier gobierno y sobre cualquier cuestión.

5. If Iran has not agreed to suspend its enrichment of uranium by February 21, the UN Security Council may contemplate more severe sanctions. Although France severed all ties with Iran from 1987-1988 due to Hizbollah’s involvement in terrorist attacks in Paris from 1985-1986, Chirac now appears to be abandoning the implementation of sanctions as a possible recourse. As a Security and Defense expert for HARKA, how would you recommend the west address this issue?

Amo a Francia y, especialmente, a su cultura casi como un estadounidense formado en New Orleans o como un sefardí formado en la Alliance Française de Marraquesh.

Pero como España y como Israel, Francia usará de su poder en beneficio de sí misma e intentando sumar a su voluntad la de todo posible socio o contraparte. No olvidemos Francia contiene la mayor población musulmana de Europa, seguida de cerca por Alemania y el Reino Unido.

Por otra parte, Francia necesita equilibrar su relación con la Alemania que ha resultado más favorecida por la ampliación de la Unión Europea hacia el Este; en esa relación, Rusia es arbitro, como lo es también, en mi opinión, en la gestión de la crisis mundial a que puede llevar Irán con sus programas nucleares… y otros, menos publicitados.

Francia, en ese contexto, como cualquier otro Estado-nación que debe velar por sí y por los empresarios que se amparan en su bandera, hará sus fríos cálculos. Mucho me temo que, ante el supuesto que me plantean la crisis de las french-fries en 2003va a reeditarse con mayor virulencia a ambos lados del Atlántico.

No olviden que Francia, poco después de la firma del tratado de Maastricht en 1992, texto fundacional de la actual Unión Europea, promovió académicamente la puesta a disposición de sus armas nucleares al servicio de una política de seguridad y de defensa para Europa, autónoma respecto de los EE.UU.. Recordando mis conversaciones, hacia 1997, con el ya fallecido general Fricaud-Chagnoud, asesor permanente de la Presidencia de la República respecto de asuntos nucleares desde los tiempos de De Gaulle, sigo deduciendo que la voluntad de Francia es liderar la política europea respecto de la cuestión de las armas nucleares en todo tiempo y lugar.

Dicho esto, no todo está escrito de antemano. No en vano, el propio general Fricaud-Chagnoud elogiaba, en los altos de dichas conversaciones, al llorado Mordechai “Motta” Gur, compagnon suyo en los estudios de la École Militaire de París.

6. Over the past few years, many European countries have experienced rapid growth in their immigrant and minority communities. Could you tell us briefly about Spain’s approach toward the integration-societal, political and economic of these immigrant groups? What are the challenges or obstacles Spain faces in that process and how do you think they could be overcome?

En mi opinión, una de las más pragmáticas y profundamente democráticas decisiones del actual gobierno español fue la regularización, en 2004-2005, de la inmensa mayoría de los emigrantes ilegales recibidos en España los diez años anteriores.

Pese al griterío, en el fondo las derechas españolas protestaron con sordina ante esa decisión. Francia y Alemania, por el contrario, han hecho pagar a España esa decisión en el seno de la Unión Europea y, en especial, en sus políticas comunes de prevención de la inmigración ilegal y, mucho me temo, de prevención y lucha antiterrorista.

¿Por qué razón?. España, junto a EE.UU. y Finlandia, será el único país de la OSCE que crecerá económicamente con fuerza en los próximos años, tal cual han señalado reiteradamente informes de entidades tan poco soñadoras como el Deutsche Bank. Dichos informes, cotejados con la realidad, constatan que dicho crecimiento se basa fundamentalmente en la aportación laboral, empresarial y financiera que realizan los emigrantes.

Dicho esto, en pocos años ese maná dejará de caer en España con efectos tan beneficiosos y los problemas asociados a la inmigración y a la diferenciación social y mental entre gentes de éxito y gentes fracasadas surgirá, como en todas partes.

Sin embargo, a diferencia del resto de los países de Europa, la emigración de hispanos desde Latinoamérica limita el choque cultural siempre asociado al racismo. Y han ido muchos hispanos a España, más de un millón de personas en un país donde sólo hace quince años era muy raro ver a un sólo indígena americano o un afro-hispano-americano salvo que fuera un turista rico o un artista. Son gentes culturalmente católicas en su mayoría, que conocen el idioma castellano, el idioma español común. Tiene claras aspiraciones vitales muy similares a las de los españoles de hoy y para nada son unos izquierdistas al estilo de Chávez o Castro. Como resultado, se integran fácilmente en la sociedad española. Déjenme añadir que no pocos de los hispanos de América que llegan a España son de origen askenazí, especialmente de la Argentina y el Uruguay.

La población inmigrante procedente de los países del Norte de África, del Sahel e, incluso del Golfo de Guinea presenta características similares a la residente en otros países europeos. Simplificando, la mayoría de árabes y africanos que llegan son gente con similares aspiraciones vitales que todos nosotros. Sólo una minoría pueden ser manipulados por los fundamentalistas que predican la Jihad. Pero los preparativos y actos criminales de quienes caen en esas redes no deben llevar a castigar colectivamente al resto de miembros de sus comunidades en España.

La población española, en general, acepta los riesgos que están asociados a las oportunidades que genera la inmigración, todavía hoy, en beneficio de todos. El problema que se planteará cuando la inmigración deje de crear beneficios empresariales y sociales evidentes tiene mucho más que ver con la estructura productiva de España. Esa estructura productiva, desde los años sesenta del pasado siglo, ha evolucionado para bien pero no ha cambiado en esencia y en tendencias al ritmo que requiere la competencia en todas las facetas de la actividad humana creadora de riqueza y bienestar en un mundo, a Dios gracias, cada vez más globalizado.


7. How did the Madrid attacks impact Spanish daily and social life? What steps has the government taken and what recommendations would you make? How are secular separatist groups, such as ETA, as opposed to Islamist groups, such as Al Qaeda, differentiated in policy-making and public opinion?

La conmoción inmediata de los ataques del 11-M facilitó extraordinariamente el cambio de gobierno en España en las elecciones generales que estaba previsto realizar tres días después. Y que se realizaron con todas las garantías constitucionales.

Pero la conmoción a largo plazo, es muy similar en el fondo a la que se produjo tras el llamado desastre de Annual, de 1921, cuando insurgentes rifeños del Norte de Marruecos masacraron a cerca de 20.000 soldados españoles en poco más de tres días.

Todo el debate político, social e ideológico en España durante los últimos tres años gira en torno a ese ataque criminal. Y sus consecuencias ya afectan al propio debate ideológico y constitucional en España, como se ha ido viendo en tanto duró la tregua de casi un año que ETA rompió con su ataque al aeropuerto de Madrid el pasado 30 de diciembre y se confirma cada día que pasa

A los errores del gobierno del sr. Aznar cometidos el 11-M pueden haberse sumado los de todo el espectro español de políticos, periodistas, intelectuales y servidores públicos ya desde antes de esa fecha y hasta ahora mismo. Incluso desde medios muy cercanos al sr. Aznar se sigue propagando la teoría de que existió una gran conspiración que aunó a ETA y a los salafistas marroquíes que cometieron físicamente los crímenes. Una conspiración en la que habrían participado también los servicios secretos franceses y marroquíes, por no citar a policías afectos a los líderes socialistas españoles…

El hecho es que España, aparte del atentado fallido con el líder empresarial –y judío- Max Mazim en 1978 y el atentado auspiciado por Libia en 1985 contra un restaurante frecuentado por militares estadounidenses, no había conocido actos abiertos terrorismo de inspiración árabe o islámica. Las relaciones especiales con los regímenes árabes que se han sucedido desde los tiempos del Muftí de Jerusalén en 1945 hasta hoy por parte de las autoridades públicas y lograron servicios secretos españoles lograron ese éxito operacional, que al final no ha tenido continuidad estratégica.

ETA sostuvo relaciones operativas, por ejemplo, con la Argelia de Boumedian o con la fracción palestina de Georges Habache, auspiciada por Siria… Tal vez, algo tuvieran que ver las relaciones con Habache con el asesinato de un firme luchador contra ETA, con cuya gente negoció en nombre de España, el embajador español Pedro de Arístegui en Beirut el 16 de abril de 1989. Pero dudo mucho que, antes del 11-M y hasta hoy, ETA tenga relación alguna con Al Qaeda u otros grupos terroristas sunnies. En todo caso, el juicio del 11-M ha entrado en su fase oral y la verdad, la verdad judicial, será establecida. Respecto de los pasdharán iraníes… todo es posible…

En cualquier caso, como dijo hasta hace poco el sr. Aznar, el terrorismo es terrorismo.

Los cuerpos destrozados e incinerados que causan los actos terroristas impresionan.

Pero lo más grave es el mensaje que con cada crimen terrorista se envía. La voluntad de los terroristas se basa en su convicción de que están legitimados por la violencia y sólo por la violencia. El caso de ETA es paradigmático; todas sus crisis desde hace cuarenta años hasta hoy han sido resueltas por la aplicación de violencia contra la población española y, diría que con científica precisión nazi, entre sus propios militantes armados y en las organizaciones políticas y sociales que los apoyan.

Desgraciadamente, la perversa educación para la paz inducida por el régimen franquista con propósitos de dominio político sobre la población, sorprendentemente asumida por todos los gobiernos democráticos sin excepción hasta hoy, limita las capacidades democráticas de lucha contra los terroristas, vengan de donde vengan y se alíen con quién se alíen. Hace ya mucho tiempo que sospecho que el malestar en muchos sectores que genera en España la decidida lucha de Israel contra el terrorismo tiene también que ver con la falta de rigurosa formación democrática en cómo y hasta donde es legítimo aplicar la violencia en defensa de nuestras vidas y de nuestros comunes valores materiales y, sobre todo, éticos.

Y ya enseñan los escritos más antiguos que toda ética es política y toda política es ética.

Por contra, un ya viejo texto de Ernst Gellner “An Anthropological View of War and Violence” (Robert A. Hinde (ed). The Institution of War. (Basingstroke and London: Comminan: 1991) avisa sobre la perversa utilización de la violencia que realizan los terroristas y otros criminales y sobre las consecuencias políticas y morales que pueden generar entre los hombres y mujeres libres en estos nuestros días. Temo que, como tantos buenos libros y artículos al respecto, no ha sido leído mucho en España: no hace tanto tiempo –veinticinco años- que había un apoyo expreso al tradicional pretorianismo militar en la política española y la propia ETA gozaba de predicamento en no pocos sectores intelectuales de la izquierda española

Afortunadamente, constato que, en otros lugares, los conceptos democráticos sobre el los límites y fines del empleo de la fuerza, si dañados, permanecen firmemente arraigados en no pocas corazones y mentes: pienso, en referencia a los EE.UU. y a la influencia que pueda tener Gellner, en los combatientes intelectuales del CETO-USMC y los chicos de Petraeus.

8. You traveled to Israel on an educational seminar in September, 2006. Could you share with us some of the people you met and places you found most interesting or memorable?

Aquel fue mi primer viaje físico a Israel y sé que no será el último. Me piden que relate aquí algo memorable para mí. Lo he escrito en mi blog personal en español. Lo resumo:

Sabbath en Jerusalén. Los judíos creyentes cumpliendo con sus preceptos, según cada una de sus escuelas rabínicas y costumbres culturales heredadas. En un disco bar de Jerusalén, decenas de jóvenes de todos los colores y de toda orientación sexual imaginable bailando. Celebrando la vida a su modo, defendidos en ese ejercicio de libertad por si mismos como ciudadanos de Israel, habiendo defendido a todos los practicantes de todas las religiones y confesiones presentes en la ciudad a ser como son. Ese hecho memorable, vivido por mí cumplidos de largo los cuarenta años de edad, enamorado de una mujer, padre de cuatro hijos, tiene para mí un título que todavía no he empleado: “Thomas Jefferson en Jerusalén”.

Y conste que estimo mucho más decisivo para mi formación como ser humano haber leído The Destruction of the European Jews de Raul Hilberg, que haber leído cualquier obra de Hannah Arendt.

9. Many Project Interchange alumni return to their home countries with increased interest and background knowledge about Israel and the Middle East. Did your participation in the seminar impact your professional life, and if so, how?

No estaría intentando responder lo más rigurosamente posible a este cuestionario si no fuera así, si no lo viviera así.

Caminar por las calles y los campos, hablar con las muy diversas gentes mientras se respira el mismo aire y se comparte el mismo alimento es el único antídoto contra la locura de políticos e intelectuales. Y temo que, como todo ser humano, soy político e intelectual sujeto al riesgo de enloquecer.

Al saber y comprender respecto de Israel, sobre el terreno y tratando con sus gentes, obliga a tomar decisiones personales y públicas que en ocasiones son muy difíciles y comprometidas.

Sin entrar en más detalles, ese viaje me ha llevado a tomar decisiones. Y una de ellas es contestar este cuestionario para su publicación.

10. Project Interchange is based on the premise that personal travel and experience in Israel can significantly advance and expand understanding of Israel -- in all its complexity and diversity. Do you agree with this?

Indudablemente, si.


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