Cataluña, principado de España, es objeto de no tan oscurecidos deseos.
Quien no goza del favor de Barcelona, ya puede ir despidiéndose de España.
Cierto es que la privatizada ENDESA, la pública REE y el mítico Zaplana no tienen por objeto social la conquista del Estado.
Servidor que, a la británica, siempre ha querido como español poder llegar a ser un señor de derechas de toda la vida, confía plenamente en el buen hacer de Rajoy.
Ya veremos el alcance mediático y político de dos noticias surgidas en paralelo:
2. Zaplana insta al TC a emitir un fallo sobre el Estatuto catalán antes de las elecciones.
Decía Pangloss que “no hay casualidades, hay causalidades”.
Voltaire, creador del carácter panglossiano y que hizo su fortuna, no con los libros, sino especulando con información privilegiada –era confidente íntimo de Federico de Prusia- en
Pero, a veces,... espero que en el PP y sus familias Voltaire no tenga seguidores, aunque se publiquen como católicos y heterosexuales.
No hay comentarios:
Publicar un comentario