Este viejo puente está destruido desde
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Siento cierto pudor al comprobar hoy la conmemoración -anticipada por parte o facción- sobre el X aniversario del secuestro de Miguel Ángel Blanco.
Y el pudor, tal vez impide el análisis, pero desde luego no consiente la manipulación.
¿Imagino, pues, la imagen de Carlos Totorika, alcalde de Ermua entonces y ahora, apagando personalmente el incendio de una sede de HB la noche en que se cometió el asesinato de Miguel Ángel Blanco, y defendiendo con ello el necesario orden público democrático?
Ruego a algún amable lector que me saque de esa duda pues los mitos fundacionales son necesarios.
Porque, si esa imagen no es imaginada sino certero recuerdo, no todo está perdido.
1 comentario:
¿ 10 años ya ? Como pasa el tiempo. Los recuerdos aún me son muy vividos.No fue ningún sueño, Jorge, fue la demostración que unidos podemos acabar con el terrorismo. Unidos los ciudadanos con ciudadanos, sin que los partidos políticos usasen esa muerte en su provecho. Cuando así actuaron, se desvaneció la acción ciudadana, y solo quedaron intereses partidistas. Pero quiero creer que si una vez fue posible la unión del pueblo contra ETA, esa opción permanece aún en la memoria y los deseos de muchos ciudadanos anónimos.
No quiero creer que solo fue flor de un día, o la enésima esperanza truncada.
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