Cataluña, tan española como siempre

Le tomo 'prestada' la imagen del toro de Osborne, ese torito guapo, a Jorge Moragas, de su entrada del martes pasado Lágrimas Secas, referida a las elecciones autónomicas en la Cataluña española, que la francesa -el Rosellón- ningún nacionalista español la reclama y no sé bien por qué.

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Las elecciones citadas han arrojado resultados previsibles si tomamos en cuenta que la Cataluña española es multicultural y altamente diversificada, como corresponde a su profunda españolidad.

1. El catalanismo político, transversal para todas las opciones políticas que quieran tener capacidad real de formar parte del gobierno autónomo de Cataluña, pese a los enormes esfuerzos de inteligente Piqué, ha vuelto a triunfar como lo ha hecho desde 1977.
2. El Bajo Llobregat, malgré Zaragoza, se ha abstenido: la reserva de votos del PSC-PSOE sólo ha sido limada por Ciutadans de Catalunya en los distritos barceloneses -mis distritos, junto a San Antonio- de San Gervasio y Sarriá, habiendo sido devueltos los prestados en 2003 a IC-EV por los comunistas patanegra, los pacifistas pesebreros y las juventudes biempensantes aculturadas por la Abeja Maya, un producto cuyo origen nazi ha sido olvidado.
3. Mas -antiguo novio de una de las García Valdecasas- ha vencido en toda regla, teniendo como siempre a su espalda a Duràn i Lleida, y cierto ex consejero de Gobernación por ERC tiene claro que no hará sangre entre sus correligionarios nacionalistas que han resistido bien tanto el paso por el tripartito como por la oposición, y
4. Zapatero tendría que tener muy en cuenta la sonrisa de Maragall. Un error de cálculo del leonés forofo del Barça y, a las próximas, la marca PSOE tendría que intentar fagocitar, para tener alguna opción de presencia en Cataluña, en competencia con el PP, ese CDS que puede resultar ser Ciutadans a la postre.

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A Moragas, con todo mi aprecio, que personalmente sabe que lo tiene, tengo que comentarle que sus lágrimas secas merecen respuesta equivalente -como recordaba el barcelonés madrileño Luis Carandell- a la que obtuvo un diputado conservador cuando en las Cortes de la Restauración clamaba "¿Qué será del futuro de nuestros hijos?"; desde las bancadas gubernamentales, se le recordó: "Al suyo, lo tenemos de Subsecretario?".

No sabemos si, persistiendo en los errores el PP y sumándosele, tal vez, el PSOE, Moragas, como responsable de Internacional que es en Génova-FAES, tendrá que tratar como ministro plenipotenciario con nuevos Estados europeos, en la Europa de los pueblos que promueve buena parte de la curia de la Santa Sede, no sólo en el caso de Croacia.

Dicho esto, de corazón, viva Cuba libre.

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Mientras tanto, conviene avisar que, en la Cataluña española, se está formando un frente de rechazo, que abarca desde el PP hasta los sectores más inteligentes de ERC, al intento de consolidar el Institut Internacional per la Pau.

Ya hay demasiada grasa empleada en tal invento, mientras que las cuestiones de seguridad ciudadana diaria, que han determinado el resultado de los últimos comicios, han de ser resueltas contando, como se contará, con la cooperación de la Guardia Civil a través del Ministerio del Interior.

Los franceses observan, callan y actúan.