7/30/2006

Qana: salven a los niños desde el primer momento.

A las 13:44 hora peninsular oficial española se ha recibido la siguiente declaración de Javier Solana, Alto Representante para la Política Exterior de la Unión Europea:

"I have talked to the Prime Minister of Lebanon, M. Fouad SINIORA. I have expressed to him my profound dismay and deep sorrow at the attack and the death of innocent civilians in Qana. Nothing can justify that. I have transmitted to him that the European Union is continuously working to reach an immediate ceasefire." Brussels, 30 July 2006; S222/06.

Políticamente, la UE señala que nada puede justificar las muertes de civiles inocentes en Qana. En consecuencia, se refuerza la voluntad política de la UE por alcanzar un inmediato alto el fuego.

Objetivamente, las muertes de civiles inocentes en Qana favorecen el lograr la detención de la ofensiva israelí por parte del gobierno de coalición libanés, en el que participa una representación de Hizbullah, mediando la presión internacional.

El gobierno israelí, por su parte, declara que durante tres días se urgió la evacuación de civiles de la ciudad de Qana, por ser esta base del lanzamiento de cohetes contra Israel.

Políticamente, esa evacuación hubiera permitido al ejército israelí batir los objetivos designados en Qana sin correr el riesgo de matar civiles inocentes.

Objetivamente, de haber sido así, la victoria táctica sobre el terreno por parte israelí habría quedado asegurada, avanzando un paso más para lograr su objetivo estratégico declarado: destruir la capacidad de ataque de Hizbullah en el Líbano.

La opinión pública europea, es decir, el reflejo de esta en la inmensa mayoría de sus medios de comunicación y ámbitos de decisión política, está escandalizada por lo que se califica como crímen. Los primeros comentarios periodísticos de urgencia, recuerdan que en la misma ciudad, en 1996, se produjo otra matanza similar cuyo resultado fue la finalización de las operaciones israelíes en curso y exigen, como refleja la declaración de Solana, que ésta vez ocurra otro tanto.

El cartel inserto en esta anotación forma parte de la exposición sobre la Guerra de los Niños que actualmente mantiene abierta el Imperial War Museum de Londres, abierta a todos los visitantes de la capital británica que estén interesados en la memoria histórica de esa ciudadanía occidental.

El cartel formaba parte de la campaña que, desde 1939, mucho antes de que se bombardearan los nucleos civiles del Reino Unido, el gobierno británico desarrollaba para que los niños -en la medida de lo posible, junto a sus madres- fueran evacuados de las ciudades, lejos del riesgo de sufrir directamente los ataques aéreos. En este caso, el cartel avisaba a las madres evacuadas de la tentación -comprensible- de regresar con sus hijos a las ciudades bombardaeadas desde sus lugares de evacuación.

No se si otros contendientes en los años cuarenta hicieron lo propio. Mi pregunta es: ¿qué medidas han tomado todos los contendientes en esta guerra del Líbano para evitar que sus niños sufran las consecuencias directas de la misma? No me atrevo a formular las posibles respuestas: podría ocurrir que, entre otras derivadas, incluyeran una explicación -ya que no una justificación- de las operaciones israelíes en curso.